En una entrevista en exclusiva para el diario Panorama, el embajador de
Venezuela en Colombia, Iván Rincón Urdaneta, reveló que son los
paramilitares los dueños de la mercancía que se va para el vecino país a
través del contrabando.
Rincón aseguró que grupos paramilitares llamados “Los Rastrojos”, “Los Urabeños” y las “Bacrin” son los encargados del contrabando de extracción y que por tanto “obtienen grandes ganancias”, e indicó que según cifras aportadas por el mismo Gobierno colombiano, el 20% de la gasolina que consume la nación neogranadina les llega por contrabando.
En este sentido, el Embajador recordó la reunión que sostuvieron los mandatarios Nicolás Maduro y Juan Manuel Santos en Cartagena, en la cual acordaron “crear un comando de las fuerzas militares de ambos países en la frontera”, y adelantó “ya están comisiones trabajando para activar los grupos de comando. La idea es que se cree del lado colombiano un comando, y otro del lado venezolano”.
Sin embargo, recalcó que los venezolanos somos los principales afectados de este hecho, ya que el 30% de nuestros productos son los que se van al contrabando, agravando el desabastecimiento y promoviendo la guerra económica.
“Si no se toman esas medidas fuertes indudablemente que nosotros somos muy afectados porque el 30% de nuestros productos se vienen de contrabando a Colombia, nosotros hacemos un trabajo acá permanente y vemos que no ha descendido, esperamos que con estas nuevas medidas que deben comenzar a funcionar la próxima semana, estemos bajando ese desangre que tiene Venezuela”, aseveró.
El embajador expresó que el país hermano también se ve afectado, debido que el contrabando desarrolla el comercio informal en las localidades fronterizas como Cúcuta.
“Colombia también se afecta porque en el caso de Cúcuta el contrabando ha acabado con la industria, con la pequeña y mediana empresa. Voceros de las cámaras de empresarios colombianos dicen que el 70% de la economía en Cúcuta es informal, es decir, que ha desaparecido la empresa para darle paso al contrabando y lo que más afecta a esos países es que detrás de eso hay mafias”, destacó Iván Rincón.
No obstante, muchos analistas aseguran que la responsabilidad es totalmente venezolana, ya que estos productos básicos como la gasolina entran en grandes camiones fácilmente detectables, y son productos indispensables en las actividades económicas fronterizas, para lo cual el país vecino nunca tendrá problemas en que les entre gasolina a bajo precio. Además opinan que se deben crear acuerdos entre ambos países para contrarrestar el contrabando y así impedir más pérdidas monetarias al Estado venezolano.
Rincón aseguró que grupos paramilitares llamados “Los Rastrojos”, “Los Urabeños” y las “Bacrin” son los encargados del contrabando de extracción y que por tanto “obtienen grandes ganancias”, e indicó que según cifras aportadas por el mismo Gobierno colombiano, el 20% de la gasolina que consume la nación neogranadina les llega por contrabando.
En este sentido, el Embajador recordó la reunión que sostuvieron los mandatarios Nicolás Maduro y Juan Manuel Santos en Cartagena, en la cual acordaron “crear un comando de las fuerzas militares de ambos países en la frontera”, y adelantó “ya están comisiones trabajando para activar los grupos de comando. La idea es que se cree del lado colombiano un comando, y otro del lado venezolano”.
Sin embargo, recalcó que los venezolanos somos los principales afectados de este hecho, ya que el 30% de nuestros productos son los que se van al contrabando, agravando el desabastecimiento y promoviendo la guerra económica.
“Si no se toman esas medidas fuertes indudablemente que nosotros somos muy afectados porque el 30% de nuestros productos se vienen de contrabando a Colombia, nosotros hacemos un trabajo acá permanente y vemos que no ha descendido, esperamos que con estas nuevas medidas que deben comenzar a funcionar la próxima semana, estemos bajando ese desangre que tiene Venezuela”, aseveró.
El embajador expresó que el país hermano también se ve afectado, debido que el contrabando desarrolla el comercio informal en las localidades fronterizas como Cúcuta.
“Colombia también se afecta porque en el caso de Cúcuta el contrabando ha acabado con la industria, con la pequeña y mediana empresa. Voceros de las cámaras de empresarios colombianos dicen que el 70% de la economía en Cúcuta es informal, es decir, que ha desaparecido la empresa para darle paso al contrabando y lo que más afecta a esos países es que detrás de eso hay mafias”, destacó Iván Rincón.
No obstante, muchos analistas aseguran que la responsabilidad es totalmente venezolana, ya que estos productos básicos como la gasolina entran en grandes camiones fácilmente detectables, y son productos indispensables en las actividades económicas fronterizas, para lo cual el país vecino nunca tendrá problemas en que les entre gasolina a bajo precio. Además opinan que se deben crear acuerdos entre ambos países para contrarrestar el contrabando y así impedir más pérdidas monetarias al Estado venezolano.
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